Miedo a comer o Deipnophobia es una de las fobias inusuales pero muy reales que existen para torturar a la gente alrededor de la mesa de la cena. La palabra Deipnophobia deriva del griego ‘deipno’ que puede traducirse como ‘conversación durante la cena’ y ‘phobos’ que es ‘aversión’ o ‘miedo profundo’. También se cree que la deipnofobia es un miedo a las comidas o banquetes grandes.
La deipnofobia es una fobia social que hace que la persona que la padece se sienta incómoda mientras come o cena en público o ante extraños. La persona teme cómo podría verse al comer y teme ser criticada. Este miedo es especialmente exacerbado cuando la persona cena afuera o tiene que comer con extraños. Ni que decir tiene que se trata de un miedo muy debilitante que hace que la persona evite todo tipo de situaciones sociales.
Causas de la deipnofobia
- La causa más común de una fobia social, incluyendo el miedo a comer o a tener conversaciones durante la cena, es un episodio traumático en el pasado, generalmente en la niñez.
- Es posible que un anciano se haya reído de la fobia o se haya regañado con ella por no haber comido bien o por haber olvidado las normas de etiqueta al cenar al aire libre.
- El episodio permanece profundamente grabado en su mente, causando un miedo arraigado a los eventos sociales que implican comer ante extraños.
- Cada vez que surge una oportunidad, la mente del fóbico recuerda ese sentimiento una y otra vez llevando a un ataque de pánico total.
- Incluso los médicos y científicos son incapaces de explicar plenamente cómo surge una fobia social como la deipnofobia.
- A veces, puede surgir de la nada.
- Una combinación de genes, química cerebral, ambiente y factores biológicos y fisiológicos también pueden contribuir a esta fobia.
- La predisposición hereditaria al aumento crónico de la tensión también puede llevar a la deipnofobia.
- La educación deficiente causada por familias rotas; la muerte o el divorcio que provoca que uno o ambos padres se muden también puede llevar a que se desarrollen habilidades sociales deficientes.
Si el niño no sabe cómo comportarse o comer o hablar durante un evento formal, puede dar lugar al temor de cenar o conversar durante la cena. Una educación con poco amor, intimidación, abuso infantil, actitudes sobre- protectoras también puede desencadenar la Deipnofobia.
Un niño también puede aprender a evitar situaciones sociales si sus padres evitan lo mismo.
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Síntomas del miedo a comer
«Todo el mundo piensa que una vez que como afuera en un restaurante, he vencido mi Deipnofobia. No entienden que es una lucha diaria. No puedo comer afuera o en frente de otras personas.»
Los síntomas de la deipnofobia pueden variar de persona a persona. Los síntomas típicos incluyen:
- Congelamiento en eventos sociales
- Comportamiento de evitación – el fóbico tiende a hacer todo lo posible para evitar eventos sociales que incluyen salir a cenar afuera.
- Temblor, sudoración, ataque de pánico completo.
- Tratando demasiado de conversar – lo que hace que el fóbico termine diciendo algo socialmente inaceptable, en cuyo caso su torpeza se convierte en una de sus muchas profecías autocumplidas.
- Los estudios han demostrado que las personas con fobias sociales como la deipnofobia terminan sintiéndose solas ya que no tienen citas, y mucho menos se casan.
- El fóbico también puede tener problemas en su trabajo. Es posible que evite las reuniones sociales que conllevan cenas. Esto puede hacer que dejen pasar los ascensos.
- Con el fin de reducir la ansiedad, la fobia puede volverse hacia el alcohol u otras drogas.
- Este abuso puede socavar la confianza y provocar aún más problemas sociales.
- La depresión también es un efecto secundario común de esta fobia.
Tratamiento para la deipnofobia
Existen dos tipos de opciones de tratamiento para una persona que tiene miedo a comer:
- Terapia con medicamentos: los medicamentos ayudan a reducir la ansiedad y la tensión que vienen con esta fobia.
- Sin embargo, los medicamentos no son una solución a largo plazo, ya que no tratan la causa raíz de la fobia.
- Por lo tanto, la terapia farmacológica siempre debe complementarse con terapia cognitivo-conductual para aumentar las probabilidades de éxito.
Terapia conductual
- Esta terapia ha demostrado resultados en la reducción de los síntomas de ansiedad.
- El terapeuta observa cómo surgieron los síntomas en primer lugar y qué los desencadena.
- La terapia conductual permite a los fóbicos tratar la ansiedad provocando pensamientos, adquiriendo habilidades sociales, practicando la superación de la evasión y enfrentándose a situaciones que dan lugar a síntomas.
- Los pacientes necesitan gastar energía para hacerlo; necesitan querer exponerse a las situaciones que desencadenan los síntomas para sentirse mejor.
- Esto puede tomar mucho esfuerzo de su parte.
