El miedo a los payasos coulrofobia se explica por el miedo a la apariencia física de los payasos. Su cara pintada de blanco, sus labios rojos e inmensos, sus pies anormalmente grandes, esta extraña mirada de un personaje que no conoce puede asustar a los más pequeños. Debido a su apariencia «diferente» y enmascarada, los payasos simplemente no inspiran confianza.
Origen
Para ir al origen de esta renuencia hacia los payasos, a veces es necesario retroceder en el tiempo. Si te tropiezas con una película con un payaso desagradable, las imágenes podrían haber causado un pequeño shock en tu cabeza. Imágenes que, dejadas enterradas en tu inconsciente, bien podrían despertar en la edad adulta. Como señala el profesor Antoine Pelissolo, psiquiatra especializado en trastornos de ansiedad, «el simple hecho de haber visto a un payaso al menos una vez en su vida en un contexto aterrador puede ser suficiente para crear una fobia.
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Causas
Se supone que los payasos nos hacen reír, pero a menudo sus rostros pintados nos ponen ansiosos más que cualquier otra cosa. Se han convertido en protagonistas del cine de terror tanto como de las fiestas infantiles. Algunos psicólogos especializados en trastornos de ansiedad, explica las razones:
Su maquillaje
- Normalmente miramos las expresiones faciales de las personas para entender cómo funcionan, pero no podemos usar esta técnica con payasos ya que están totalmente enmascarados.
- Nunca sabemos realmente lo que piensan y eso nos pone en una situación de inseguridad!
Su buen humor
- Los payasos siempre están contentos y tendemos a no confiar en la gente que siempre está contenta, con una gran sonrisa en la cara.
- Deben estar escondiendo algo.
El contexto
- Si vemos a un payaso en un circo, en su ambiente familiar, por lo general no tendremos miedo, pero lo pondremos en medio de un bosque e inmediatamente pensamos que estamos en una película de terror!
- El cliché también es válido para la niña con uniforme escolar.
Síntomas
- Al igual que la claustrofobia o la agorafobia, la simple visión de un payaso pone tu cuerpo en hiperalerta.
- El miedo es tal que no deja espacio para el razonamiento; el corazón acelera, los músculos se endurecen.
- Algunos incluso intentarán defenderse mediante la violencia para protegerse.
Tratamiento
- Entonces, ¿qué hacer en caso de un ataque repentino (de pánico)? Para los payasos como para todo lo demás, huir nunca es la solución:
- «Evitar y huir de los payasos toda la vida no es la solución y sólo agrava la fobia», subraya el especialista.
- En el caso de los niños, el método más constructivo es tranquilizarlos desensibilizándolos poco a poco, con el fin de acostumbrarse al «payaso».
- El miedo proviene de la ignorancia, de la falta de experiencia.
- Al acostumbrar a nuestros hijos a la presencia del payaso, a través de fotos o vídeos, por ejemplo, podrán enfrentarse a su miedo con suavidad y en pequeñas dosis.
- En los adultos, lo primero que hay que hacer para superar la fobia es hablar de ella.
- Ya no negarlo y tomar responsabilidad por su ansiedad es un paso obvio y esencial en la lucha contra la fobia.
- Algunos especialistas recomiendan ver películas regularmente con payasos «malos» durante 5 a 10 minutos.
- El objetivo es acostumbrarse poco a poco y desprogramar el miedo, siendo la meta, a la larga, marcar la diferencia entre payasos «graciosos» y payasos aterradores.
- Algunos también pueden someterse a psicoterapia cognitivo-conductual, generalmente recomendada para personas que sufren seriamente de miedo a los payasos.
- La psicoterapia cognitivo-conductual está diseñada para enfrentar sus miedos en presencia de un psicoterapeuta.
- El método, que ha demostrado su eficacia, mejora considerablemente la vida de los fóbicos al reducir el estrés, los espasmos y los ataques de ansiedad que formaban parte de su vida diaria.
