El miedo a una persona o blefobia es un trastorno psicológico, caracterizado por el miedo de pánico a los ojos de los demás. Esta fobia puede ser incapacitante, especialmente en la vida profesional, pero puede ser tratada efectivamente.
Características
- La blemmofobia es una fobia social.
- Se caracteriza por un miedo intenso e irracional a los demás.
- No debe confundirse con una simple timidez.
- Los blemmófobos tienen tanto miedo de ridiculizarse frente a los demás que sistemáticamente evitan hablar en público, aunque eso signifique no poder defender su punto de vista.
- Evitan las actividades de grupo tanto como sea posible, no se atreven a vestirse como quieren por miedo a llamar demasiado la atención y ser juzgados erróneamente.
Síntomas de Blemmofobia
- El miedo intenso a los ojos de los demás puede traducirse de diferentes maneras, en particular por los síntomas característicos de los ataques de ansiedad:
- Dolores de pecho, palpitaciones, temblores, sudores.
- Las personas blemmofóbicas también pueden tener la garganta anudada y la boca seca al pensar en hablar en público o incluso desmayarse.
- Por otra parte, las personas que padecen una blemmofobia grave a menudo se ven obligadas a anticiparse a todo y a planificar con suficiente antelación (preparar palabra por palabra lo que van a decir en tal o cual circunstancia o lo que van a hacer), con el fin de ser «lo más ridículos posible».
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Las causas de esta enfermedad son
- Las causas exactas de la blemmofobia pueden diferir de una persona a otra, pero en general, este trastorno psicológico es el resultado de una falta significativa de confianza en sí mismo.
- A menudo aparece durante la adolescencia, una edad delicada en la que es difícil aceptar las transformaciones del propio cuerpo y la forma en que otros lo miran.
- Ciertos eventos traumáticos (acoso escolar, por ejemplo) a veces pueden amplificar este trastorno.
¿Cuáles son los tratamientos para la blemmofobia?
- Es aconsejable tratar la blefobia lo más rápidamente posible, especialmente con la ayuda de la terapia cognitivo-conductual: esta última ayuda a confrontar gradualmente y a controlar mejor las propias ansiedades.
- El psicoanálisis también puede ser útil: busca rastrear el origen preciso de la falta de confianza en sí mismo y superarla.
- Algunas actividades también pueden ser recomendadas para domar el miedo de los demás, especialmente el teatro.
- No dude en pedir consejo a su terapeuta de antemano.
- Exponer sus cuerpos (en la playa, durante una consulta médica…) a los ojos de otras personas también es a menudo muy difícil para ellos, de nuevo por miedo a los juicios negativos.