El síndrome de Asperger solía ser una condición independiente, pero en 2013, se incluyó en la categoría de trastorno del espectro autista en el Manual Diagnóstico y Estadístico del Trastorno Mental 5 (DSM-5). Una persona con esta condición le resulta más difícil leer las señales sociales, y le resulta más difícil comunicarse e interactuar con los demás, estas dificultades pueden llevar a ansiedad y confusión. Afecta entre 0.03 a 4.84 de cada 1000 personas, a los hombres alrededor de cuatro veces más que a las mujeres.
¿Que es síndrome de Asperger?
Es un trastorno del desarrollo caracterizado por importantes dificultades en la interacción social y la comunicación no verbal, junto con patrones de comportamiento e intereses restringidos y repetitivos. Como un trastorno del espectro del autismo más leve, difiere de otros por el lenguaje y la inteligencia relativamente normales, aunque no es necesario para el diagnóstico, la torpeza física y el uso inusual del lenguaje son comunes. Los signos generalmente comienzan antes de los dos años y generalmente duran toda la vida.
Parece que los cerebros de las personas con síndrome de Asperger no tratan la información de la misma manera que los cerebros de los demás. Las personas que la padecen tienen una inteligencia promedio o superior a la media, y pueden ser bastante creativas, pero les resulta difícil la vida. En particular, les resulta difícil comunicarse e interactuar con otras personas.
Historia del síndrome de Asperger
También es conocido como trastorno de Asperger, fue descrito por primera vez en la década de 1940 por el pediatra vienés Hans Asperger, que observó conductas similares al autismo y dificultades con las habilidades sociales y de comunicación en niños que tenían inteligencia normal y desarrollo del lenguaje. Muchos profesionales sintieron que el síndrome era simplemente una forma más leve de autismo y usaron el término «autismo de alto funcionamiento» para describir a estos individuos. Uta Frith, profesor del Instituto de Neurociencia Cognitiva de University College London y editor de Autism and Asperger Syndrome, describe a los individuos con Asperger como «con una pizca de autismo».
El trastorno se agregó al Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-IV) de la Asociación Americana de Psiquiatría en 1994 como un trastorno separado del autismo. Sin embargo, todavía hay muchos profesionales que lo consideran como una forma menos severa de autismo. En 2013, el DSM-5 reemplazó el trastorno autista, el trastorno de Asperger y otros trastornos generalizados del desarrollo con el diagnóstico global del trastorno del espectro autista.
Características y síntomas del síndrome de Asperger
Las personas con este síndrome muestran intereses restringidos o especializados, como un trastorno generalizado del desarrollo, se distingue por un patrón de síntomas en lugar de un solo síntoma. Se caracteriza por un deterioro cualitativo en la interacción social, por patrones de comportamiento, actividades e intereses estereotipados y restringidos, y por ningún retraso clínicamente significativo en el desarrollo cognitivo o retraso general en el lenguaje.
La intensa preocupación por un tema restringido, la verbosidad unilateral, la prosodia restringida y la torpeza física son típicas de la afección, pero no son necesarias para el diagnóstico. El comportamiento suicida parece ocurrir a tasas similares a las que no lo tienen.
Interacción social
La falta de empatía demostrada afecta los aspectos de la vida en comunidad de las personas con síndrome de Asperger, ya que se experimentan dificultades en los elementos básicos de la interacción social, que pueden incluir el fracaso en desarrollar amistades o buscar goces o logros compartidos con otros (por ejemplo, mostrar a otros objetos de interés); una falta de reciprocidad social o emocional (mecánica social de «juegos» de dar y recibir); y conductas no verbales dañadas en áreas tales como el contacto visual, la expresión facial, la postura y el gesto.
Las personas pueden no ser tan retraídas con los demás, en comparación con aquellas con otras formas de autismo más debilitantes, se acercan a los demás, aunque torpemente. Por ejemplo, puede participar en un discurso unilateral y largo sobre un tema favorito, mientras entiende mal o no reconoce los sentimientos o reacciones del oyente, como un deseo de cambiar el tema de conversación o finalizar la interacción. Esta incomodidad social ha sido llamada «activa pero extraña», tales fallas para reaccionar apropiadamente pueden aparecer como desprecio por los sentimientos de otras personas y pueden parecer insensibles.
Algunos incluso pueden mostrar mutismo selectivo, sin hablar en absoluto a la mayoría de la gente y excesivamente a otros específicos y algunos pueden elegir solo hablar con las personas que les gustan.
Comportamiento violento o criminal
La hipótesis de que los individuos con el síndrome de Asperger están predispuestos a un comportamiento violento o criminal ha sido investigada, pero no está respaldada por datos. La evidencia sugiere que los niños diagnosticados son víctimas en lugar de delincuentes.
Una revisión de 2008 encontró que un número abrumador de delincuentes violentos informados con síndrome de Asperger también tenían otros trastornos psiquiátricos psicóticos coexistentes, como el trastorno esquizoafectivo.
Intereses y comportamiento restringido y repetitivo
Las personas pueden mostrar comportamientos, intereses y actividades que son restringidas y repetitivas y que a veces son anormalmente intensas o centradas, pueden apegarse a rutinas inflexibles, moverse de maneras estereotipadas y repetitivas, preocuparse por partes de objetos o participar en conductas compulsivas como alinear objetos para formar patrones.
La búsqueda de áreas de interés específicas y estrechas es una de las características más sorprendentes, ya que pueden recopilar volúmenes de información detallada sobre un tema relativamente limitado, como los datos meteorológicos o los nombres de estrellas, sin tener necesariamente una comprensión genuina del tema más amplio. Por ejemplo, un niño puede memorizar los números de modelo de la cámara sin preocuparse demasiado por la fotografía.
Este comportamiento suele ser evidente a los 5 o 6 años, aunque estos intereses especiales pueden cambiar de vez en cuando, por lo general se vuelven más inusuales y se centran estrechamente y con frecuencia dominan la interacción social tanto que toda la familia puede sumergirse. Debido a que los temas restringidos captan el interés de los niños, este síntoma puede pasar desapercibido.
Los comportamientos motores estereotipados y repetitivos son una parte central del diagnóstico, los cuales incluyen movimientos de la mano, como aleteo o torsión, y movimientos complejos de todo el cuerpo. Estos se suelen repetir en ráfagas más largas y se ven más voluntarios o rituales que los tics, que suelen ser más rápidos, menos rítmicos y con menor frecuencia.
Habla y lenguaje
Aunque las personas con síndrome de Asperger adquieren habilidades lingüísticas sin una demora general significativa y su habla típicamente carece de anormalidades, la adquisición y el uso del lenguaje son atípicos. Las anormalidades incluyen verbosidad, transiciones abruptas, interpretaciones literales y la incomprensión de los matices, uso de la metáfora significativa solo para el hablante, déficits de percepción auditiva, habla inusualmente pedante, formal o idiosincrásico y rarezas en volumen, tono, entonación, prosodia y ritmo.
Tres aspectos de los patrones de comunicación son de interés clínico: prosodia pobre, habla tangencial y circunstancial, y verbosidad marcada, aunque la inflexión y la entonación pueden ser menos rígidas o monótonas que en el autismo clásico, tienen un rango limitado de entonación, el habla puede ser inusualmente rápida, espasmódica o sonora, puede transmitir una sensación de incoherencia; el estilo de conversación incluyendo monólogos sobre temas que aburren al oyente, no proporciona el contexto para los comentarios, o no suprime los pensamientos internos.
Las personas con el síndrome pueden no detectar si el oyente está interesado o involucrado en la conversación. La conclusión o punto del hablante puede que nunca se haga, y los intentos del oyente de explicar el contenido del discurso o la lógica, o cambiar a temas relacionados, no tienen éxito.
Percepción motora y sensorial
Las personas con síndrome de Asperger pueden tener signos o síntomas que son independientes del diagnóstico, pero que pueden afectar al individuo o a la familia, estos incluyen diferencias en la percepción y problemas con las habilidades motoras, el sueño y las emociones.
A menudo tienen una excelente percepción auditiva y visual, demuestran una percepción mejorada de pequeños cambios en los patrones, como arreglos de objetos o imágenes bien conocidas, por lo general, esto es específico del dominio e implica el procesamiento de características de grano fino. Por el contrario, en comparación con las personas con autismo de alto funcionamiento, tienen déficits en algunas tareas que implican percepción visual-espacial, percepción auditiva o memoria visual.
Muchos relatos informan otras habilidades y experiencias sensoriales y perceptivas inusuales, pueden ser inusualmente sensibles o insensibles al sonido, a la luz y a otros estímulos, estas respuestas sensoriales se encuentran en otros trastornos del desarrollo y no son específicas. Existe poco apoyo para una mayor respuesta de lucha o huida o falta de habituación en el autismo; hay más evidencia de disminución de la respuesta a los estímulos sensoriales, aunque varios estudios no muestran diferencias.
Causas del síndrome de Asperger
La causa del síndrome de Asperger es desconocida, es probable que exista un componente genético de este síndrome, dado que se ha observado que la enfermedad se presenta en familias, también es probable que las influencias ambientales desempeñen un papel. Aunque persisten las preocupaciones entre algunas familias de que las vacunas y / o los conservantes en las vacunas pueden desempeñar un papel en el desarrollo del síndrome y otros trastornos del espectro autista, los expertos han desacreditado esta teoría.
El síndrome de Asperger es mucho más común en niños que en niñas, de hecho es 5 veces más común en los niños. El número de niños diagnosticados con trastornos del espectro autista está aumentando en los EE. UU y estudios recientes muestran que aproximadamente 1 de cada 110 lo padecen. No está del todo claro si el aumento en el número de niños se debe a mejoras y modificaciones en el proceso de diagnóstico y / o cierto grado de aumento real en la incidencia de los trastornos en sí mismos, ambos factores probablemente estén involucrados.
Diagnóstico del síndrome de Asperger
Un diagnóstico es la identificación formal de la afección, por lo general por un equipo de diagnóstico multidisciplinario, que a menudo incluye un terapeuta del habla y del lenguaje, pediatra, psiquiatra y / o psicólogo, debido a que el síndrome de Asperger varía mucho de persona a persona, hacer un diagnóstico puede ser difícil, se diagnostica más tarde en niños que en el autismo y, a veces, las dificultades pueden no ser reconocidas y diagnosticadas hasta la edad adulta.
Por lo general, se requiere un equipo interdisciplinario para una evaluación clínica integral, esta evaluación debe incluir una evaluación psicológica (que incluye, como mínimo, un funcionamiento intelectual y adaptativo), una evaluación de la comunicación (especialmente enfocada en formas de comunicación no verbales) y una evaluación neurológica, psiquiátrica y médica. Las pruebas intelectuales pueden ser de ayuda específica, ya que los puntajes verbales a menudo son significativamente más altos que los puntajes de rendimiento para niños con síndrome de Asperger.
Beneficios de un diagnóstico
Algunas personas ven un diagnóstico formal como una etiqueta inútil, pero para muchos, obtener una evaluación y un diagnóstico oportunos y completos puede ser útil porque:
- Ayuda a las personas con síndrome de Asperger (y sus familias, socios, empleadores, colegas, profesores y amigos) a comprender por qué pueden experimentar ciertas dificultades y qué pueden hacer al respecto.
- Permite a las personas acceder a servicios y soporte.
Tratamientos para el síndrome de Asperger
El tratamiento intenta manejar los síntomas angustiantes y enseñar habilidades sociales, de comunicación y vocacionales apropiadas para su edad que no se adquieren naturalmente durante el desarrollo, con una intervención adaptada a las necesidades del individuo en base a una evaluación multidisciplinaria. Aunque se ha avanzado, los datos que respaldan la eficacia de intervenciones particulares son limitados.
Terapias
El tratamiento ideal coordina las terapias que abordan los síntomas centrales del trastorno, incluidas las deficientes habilidades de comunicación y las rutinas obsesivas o repetitivas, si bien la mayoría de los profesionales están de acuerdo en que cuanto antes se intervenga, mejor, no existe un único paquete de mejores tratamientos, ya que se asemeja al de otros del espectro autista de alto funcionamiento, excepto que toma en cuenta las capacidades lingüísticas, las fortalezas verbales y las vulnerabilidades no verbales de las personas. Un programa típico generalmente incluye:
- Un procedimiento de apoyo al comportamiento positivo incluye la capacitación y el apoyo de los padres y la facultad de la escuela en las estrategias de manejo del comportamiento para usar en el hogar y la escuela.
- Una técnica de análisis de comportamiento aplicado, llamada entrenamiento de habilidades sociales para interacciones interpersonales más efectivas.
- Terapia cognitivo-conductual para mejorar el manejo del estrés relacionado con la ansiedad o las emociones explosivas y para reducir los intereses obsesivos y las rutinas repetitivas.
- Terapia ocupacional o física para ayudar con el pobre procesamiento sensorial y la coordinación motora.
- Intervención de comunicación social, que es terapia especializada del habla para ayudar con la pragmática y el dar y recibir una conversación normal.
Medicamentos
Ningún medicamento trata directamente los síntomas centrales, aunque la investigación sobre la eficacia de la intervención farmacéutica es limitada, es esencial para diagnosticar y tratar las condiciones comórbidas. Los déficits en las emociones de autoidentificación o en la observación de los efectos de la conducta en los demás pueden dificultar que las personas puedan ver por qué los medicamentos pueden ser apropiados.
La medicación puede ser efectiva en combinación con intervenciones de comportamiento y adaptaciones ambientales, como trastornos de ansiedad, trastorno depresivo mayor, falta de atención y agresión. Se ha demostrado que los medicamentos antipsicóticos atípicos risperidona, olanzapina y aripiprazol reducen los síntomas asociados, la risperidona puede reducir los comportamientos repetitivos y autolesivos, los arrebatos agresivos y la impulsividad, y mejorar los patrones estereotípicos, comportamiento y relación social.
Los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), fluoxetina, fluvoxamina y sertralina han sido efectivos en el tratamiento de intereses y conductas restringidas y repetitivas.
Se debe tener cuidado con los medicamentos, ya que los efectos secundarios pueden ser más comunes y más difíciles de evaluar en las personas, y las pruebas de eficacia de los medicamentos contra las enfermedades comórbidas excluyen habitualmente a los individuos del espectro del autismo. Las anormalidades en el metabolismo, los tiempos de conducción cardíaca y un mayor riesgo de diabetes tipo 2 se han incrementado por la preocupación con estos medicamentos, junto con los serios efectos secundarios neurológicos a largo plazo.
Los ISRS pueden conducir a manifestaciones de activación conductual, como un aumento de la impulsividad, la agresión y la alteración del sueño. El aumento de peso y la fatiga son los efectos secundarios frecuentes de la risperidona, que también pueden conducir a un mayor riesgo de síntomas extrapiramidales, como inquietud y distonía y un aumento de los niveles séricos de prolactina.
